Cuando las autoridades consulares consideren que una solicitante de visa viajará a Estados Unidos con el objetivo de que nazca su bebé se le dará un trato similar al de cualquier persona extranjera que llegue a atenderse médicamente, según una directriz transmitida el miércoles por el Departamento de Estado y conocida por The Associated Press. Las solicitantes tendrán que mostrar que vienen para recibir tratamiento médico y que tienen dinero para pagarlo.
El Departamento de Estado preveía divulgar en las próximas horas las nuevas disposiciones, dijeron a la AP dos funcionarios enterados del asunto que solicitaron guardar el anonimato. Las disposiciones entran en vigencia el viernes.
La llegada de mujeres a Estados Unidos para dar a luz es una práctica legal en esencia, aunque existen casos de arresto de operadores de agencias de turismo de parto acusados de fraude con visas o evasión fiscal. Las mujeres suelen expresar honestamente sus intenciones cuando solicitan la visa e incluso muestran contratos firmados con médicos y hospitales.
El gobierno de Trump ha restringido la inmigración en todas sus formas, pero hay una que irrita sobremanera al presidente: según la Constitución, toda persona que nace en Estados Unidos es ciudadana. Trump ha despotricado contra esa práctica y amenazado con ponerle fin, pero los estudiosos del tema y funcionarios del gobierno dicen que no es fácil.
Regular las visas de turista para mujeres embarazadas es una forma de encarar el problema, pero suscita los interrogantes sobre cómo determina el funcionario si la mujer está embarazada o si un agente fronterizo puede negar el ingreso a una mujer si sospecha con sólo mirarla que está esperando un bebé.
AP