Andy Ruiz, quien en junio pesó 268 libras, ahora detuvo la báscula en 283.7 (128 kilos), mientras su rival registró 237.7 (107 kilos).
Aunque en las últimas semanas los medios habían repetido que el mexicano nacido en Estados Unidos había bajado de peso, el aumento de masa muscular confirmado en Riad no es sorpresa. Hace una semana el presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán, había puesto en duda que Andy pesara menos.
Ruiz, de 30 años, protagonizó la más grande sorpresa del pugilismo profesional en este siglo al noquear el pasado 1 de junio en siete asaltos al portentoso Joshua en una pelea en la que salió con las apuestas en contra por 33-1 y se impuso luego de levantarse de la lona en el tercer asalto.
Hoy el mexicano nacido en Estados Unidos se topó con el gigante Joshua a quien le sostuvo la mirada durante medio minuto para luego estrechar la mano de manera sobria.
El pleito Ruiz-Joshua es una de las principales peleas del año; de ganar el mexicano comenzará confirmará su clase después de haber ganado de manera sorpresiva. De hacerlo Joshua, recuperará no solo los cinturones de campeón mundial, sino la confianza. Además de que el vencedor quedará señalado para un posible pleito por el cetro del CMB, en poder del estadounidense Deontay Wilder.
Este sábado la Diriyah Arena de Riad será escenario de una pelea de difícil pronóstico. El moreno de 1.98 metros de estatura Andy Joshua buscará recuperar sus fajas ante un campeón envuelto en carnes, de baja estatura con una velocidad inusual en la división pesada y una pegada portentosa.
EFE