Monterrey °C
  15.10.25 Ferienhaus Ostsee

A+ A A-

La primera foto de un agujero negro

Predichos por la teoría pero jamás observados directamente, los agujeros negros siguen siendo uno de los objetos más enigmáticos de nuestro cosmos.

Un círculo oscuro en medio de un disco resplandeciente: la imagen de un agujero negro fue presentada el miércoles al mundo, una primicia en la historia de la astronomía.

El primer 'monstruo' cósmico en haberse dejado captar fue detectado en el centro de la galaxia M87, a unos 50 millones de años luz de la Tierra, según los responsables del proyecto internacional bautizado Telescopio del Horizonte de Sucesos.

El resultado de más de 10 años de trabajo en el EHT Project. Foto de nsf.gov.

Los científicos ponen fin al suspense que desde hace días agita a los apasionados de la astronomía, al anunciar el resultado de un proyecto inédito destinado a captar la primera imagen de un agujero negro.

Un agujero negro es un objeto celeste que posee una masa extremadamente importante en un volumen muy pequeño. Como si la Tierra estuviera comprimida en un dedal o el sol únicamente midiera 6 km de diámetro, explicó recientemente a la agencia AFP Guy Perrin, astrónomo del Observatorio de París-PSL.

Según la ley de la relatividad general publicada en 1915 por Albert Einstein, que permite explicar su funcionamiento, la atracción gravitacional de estos "monstruos" cósmicos es tal que no se les escapa nada: ni la materia, ni la luz, sea cual sea su longitud de onda.

Hasta ahora, los agujeros negros han sido teorizados, modelizados e incluso detectados mediante pruebas indirectas, pero nunca observados. Hasta ahora.

¿Cómo verlos si son invisibles? Los astrónomos buscan observar este "monstruo" por contraste, es decir, gracias al fondo brillante que forma la materia que lo envuelve.

Por lo tanto, no se pueden observar directamente. Además, la fuerza de gravedad que emana del agujero negro es tan fenomenal que no se ha logrado recrear en laboratorio.

En abril de 2017, ocho telescopios en el mundo, unidos gracias al proyecto Telescopio del Horizonte de Sucesos (o Event Horizon Telescope, EHT, en inglés), colocaron en su punto de mira de forma simultánea dos agujeros negros: Sagittarius A*, en el centro de la Vía Láctea, y su congénere de la galaxia M87. Con un objetivo: tratar de obtener una imagen.

Desde entonces, la comunidad científica espera los resultados.

Pero sabemos que existen de dos tipos:

Los agujeros negros estelares, que se forman al final del ciclo de vida de una estrella y que son extremadamente pequeños: tratar de observar los más cercanos equivaldría a buscar distinguir una célula humana en la luna.

Los segundos, los agujeros negros supermasivos, se hallan en el centro de las galaxias y su masa está comprendida entre un millón y miles de millones de veces la del sol.


 

 

 

 

esc-info2025.png 

sanpedro_092025-2.jpg

 

abajored2

Escribenos a laredpuntocom@live.com