El tifón Tisoy ha dejado al menos 17 personas muertas y dos desparecidas, además de medio millón desplazadas, a su paso por el sur de Filipinas, informaron las autoridades locales, que hicieron un llamado a tomar precauciones y estar alerta a los avisos de evacuación.
Según fuentes del Centro Nacional de Reducción de Desastres (NDRRMC), cuatro personas murieron ahogadas al intentar cruzar un río en las provincias de Sorsogón, Camarines Sur y Quezón, mientras otras cinco fallecieron debido a la caída de árboles en las provincias de Marinduque, Leyte y Quezón.
El Gobierno filipino declaró la alerta en al menos 50 provincias. Las clases han sido suspendidas en 20 provincias del este y el norte del país, así como en la capital, Manila. Más de 458 mil personas se encuentran en centros de evacuación.
Además, 521 vuelos domésticos e internacionales fueron cancelados debido al mal tiempo, la mayoría a raíz de la suspensión durante el martes de todas las operaciones en el Aeropuerto Internacional Ninoy Aquino de Manila.
El Consejo de Gestión de Reducción de Riesgos y Desastres de Calbayog (CDRRMC) recomendó ese miércoles declarar el estado de calamidad después de que el tifón Tisoy dejara un rastro de destrucción y muerte en la ciudad.
El tifón afectó a las 21 aldeas de la ciudad con varias infraestructuras dañadas por fuertes vientos. Al menos 33 casas fueron totalmente dañadas, mientras que dos mil 752 fueron parcialmente dañadas, dijo Ricafort.