Este mal congénito e irreversible se presenta entre los 18 meses y tres años de edad y se caracteriza por la práctica repetitiva de actividades y, en algunas ocasiones, comportamientos violentos, falta de contacto visual, escasa comunicación verbal con el resto de la gente, bajo nivel de socialización y dificultad de aprendizaje", indicó el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
Por lo anterior y para mejorar la calidad de vida de los pequeños, es importante que el menor inicie un tratamiento médico y de rehabilitación, como el que se otorga en el Centro Estatal de Rehabilitación Especial (CERE), donde se brinda terapia física y ocupacional al paciente, a través de herramientas visuales, auditivas y táctiles.
Por medio de este tratamiento, los niños con síndrome del espectro autista perciben estímulos y mejoran su desarrollo físico, motriz, psicológico y de lenguaje, afirmó el sector salud público estata
fuente hoyestado.com